¿Qué piensas cuando abres tu Biblia? ¿Qué esperas de tu tiempo devocional?
¿Vienes a Dios con la seguridad de que te va a hablar?
Me he dado cuenta de que muchas veces abro la Biblia sólo para leer mi capítulo. Y en los días cuando tengo mucho por hacer o estoy preocupada por algo, poquito peor, porque no me puedo concentrar.
Pero, últimamente he pensado que el ver tu tiempo devocional como algo que tienes que hacer para complacer a Dios o como un deber cristiano o como algo que hago si no se te llena el tiempo de otros compromisos ha de decepcionar bastante a Dios.
¡Dios me salvó para poder tener una relación cercana conmigo!
Dios me quiere hablar. Por eso es que es tan importante leer mi Biblia anticipando un mensaje de Él. ¡Porque Dios quiere comunicarse conmigo!
¿Esto quiere decir que cuando no tengo ganas de hablar con Dios, no debo leer la Biblia? ¿Quiere decir que sólo debo leer la Biblia cuando me siento cerca a Dios? ¿Quiere decir que cuando quiero oír la voz de Dios leo, y cuando no quiero oír su voz, no leo?
¡Claro que no!
El hábito de leer la Biblia diario, tenga o no ganas de hacerlo, me dará la oportunidad de oír la voz de Dios, ¡todos los días! Es esencial leerla, independientemente de cómo me sienta o de mi cercanía a Dios.
Lo que quiero enfatizar es que sería bueno abrir la Biblia con una expectativa diferente, con anticipación porque sé que Dios me va a hablar.
Quizás en días pasados has abierto la Biblia sólo para leer tu pasaje del día. Pero, mañana y todos los días de ahora en adelante, abre tu Biblia con la seguridad de que Dios te quiere hablar, sólo es cuestión de que tú lo escuches.
¿Qué te va a decir por medio de tu lectura mañana?
