¿Sabes qué define al misionero?
Quizás esta pregunta te haga pensar en una persona dedicada al Señor que ha trabajado mucho cerca de ti y que Dios ha usado grandemente en tu vida. Quizás estés pensando en tu biografía preferida. Quizás pienses en un grupo de jóvenes que viajan a otro país para trabajar en la obra misionera durante unas semanas. Pero, ninguna de estas respuestas está completa.
Un misionero es una persona que tiene una misión.
Simple y sencillo.
Y según esta definición, ¡tú eres un misionero!
Tú tienes una misión en esta vida. Dios te llamó y te salvó según Su propósito. Él ya tiene preparadas buenas obras, para que tú las hagas.
¿Cuáles obras? ¿Qué quiere Dios que hagas?
Primero, ¡ir por todo el mundo y predicar el evangelio!
¿Pero qué si no puedes viajar? Tienes obligaciones donde estás, no has terminado la prepa, o apenas estás a media carrera, o justo te vas a casar… Cuando empiezas a pensar así, es bueno recordar que el Señor dio este mandato a más de 500 discípulos. Seguramente, entre ellos hubo gente que no se podía cambiar de ciudad. No todos podían dejar sus trabajos y sus familias, mudarse a otro país y aprender otro idioma.
¿Entonces, cómo obedecieron ellos?
Compartieron el evangelio en el mundo en que habitaban. Todos tenían amigos, familiares, conocidos que no eran salvos. No cabe duda de eso. Pero, tampoco cabe duda de que los más de 500 discípulos compartieron el mensaje de salvación, porque ¡pronto llegó a haber tantos cristianos en esa parte del mundo que el emperador los veía como una amenaza a su imperio!
Compartieron el evangelio donde estaban.
Ese es el punto.
Si Pablo estaba en Atenas, allí predicaba el evangelio. Si Dorcas estaba en su casa con sus amigas, allí les hablaba del evangelio. Si Felipe estaba en el desierto, allí predicaba el evangelio. Si Lidia invitaba a unos socios a comer, allí hablaba del evangelio.
En donde estuvieran, ellos cumplían con la misión que había dado el Señor.
Así como el Señor le dio esa misión a los más de 500 en Marcos 16:15, también te da esa misión a ti, creyente.
Tú eres misionero.
¿Estás cumpliendo tu misión?