Lo maravilloso de cuando se va la luz en la tarde es que pasas tiempo haciendo cosas que quizás no hubieras hecho. Por ejemplo, agarré un libro y me salí al parque, cuando normalmente me hubiera sentado en la sala con mi computadora.
Pero bueno, a parte de que se fue la luz y aún no ha regresado, estas cosas siguen siendo maravillosas:
1. Un vaso de elote con queso, crema, tres tipos de salsa y limón.
Tenía mucho tiempo sin probarlo y ahora se pone una señora afuera de la casa a vender y me he vuelto un poco adicta. La textura del elote, el sabor de las salsas con la crema, el toque de limón… ¡Dios realmente mostró su creatividad cuando hizo la comida!
2. Una conversación con una persona que realmente quiere saber más del evangelio.
Es inusual toparse con una persona que con completa sinceridad está buscando servir a Dios. Fue maravilloso oír una persona expresar su deseo de ser salva y hacer la voluntad de Dios.
3. El yoghurt congelado en casa.
¿Qué es más fácil que verter un poco de tu yoghurt preferido en un vaso y meterlo al congelador durante unas horas? ¡Sólo comértelo! Lo disfruto tanto ahorita que está haciendo calor por las tardes… ¡y aparte, es saludable!
¿Te has quedado sin luz últimamente? ¿O has experimentado otras maravillas? ¡Cuéntame en los comentarios!