Dios dio funciones distintas a los hombres y a las mujeres en las iglesias locales. Pero, creo que también en lugares que a penas son misiones, las mujeres tienen mucho que contribuir que los hombres no pueden. Hay muchas razones por las cuales es importante que las mujeres participen y apoyen en obras misioneras. Aquí, sólo presento cinco:
- Las mujeres se cubren la cabeza según 1 Corintios 11 para mostrar la sujeción de la congregación a Cristo
- Las mujeres demuestran al mundo lo que es la femineidad como Dios la diseñó
- Las mujeres brindan un equilibrio a la congregación con la sabiduría, gracia y ánimo que dan a los demás
- Las mujeres pueden conversar con mujeres y jovencitas no creyentes, y en especial, escucharlas, en conversaciones privadas
- Las mujeres pueden ganarse a los niños pequeños en clases bíblicas de una manera especial.
