“Y glorificaban a Dios en mí.”
En Gálatas 1 el apóstol Pablo cuenta cómo Dios empezó a usarlo y concluye con esa frase.
“Y glorificaban a Dios en mí.”
Ésta es la conclusión de su testimonio.
Cuando los demás hermanos observaron su vida, glorificaron a Dios. El cambio que Dios hizo en su vida, el servicio que le dio al Señor, la forma en que Dios lo estaba usando para llevar el evangelio… todo esto hizo que glorificaran a Dios.